Hoy en Plástica os propongo una actividad con múltiples matices que podéis seleccionar y aplicar a vuestro gusto: colorear con ceras fundidas. Veamos primero un vídeo explicativo:
Es una técnica muy fácil de realizar y con un presupuesto estrictamente reducido. En las imágenes se muestran diferentes posibilidades y opciones para que seleccionéis vuestra preferida:
Para tener nuestro propio ejemplar necesitaremos los siguientes materiales:
- Lienzos.
- Ceras viejas (las manley son más fáciles de derretir)
- Un secador de pelo.
- Pegamento.
- Una tela vieja para proteger el suelo.
Extender la la tela vieja en el suelo y diseñar el lienzo y la distribución de los lápices de colores. Luego, pegar los lápices de colores en el lienzo y esperar
Una vez que los lápices de colores se hayan derretido, dejamos el lienzo apoyado en posición vertical cerca de 20 minutos para que los colores sigan deslizándose mientras se secan. Obtendremos un bello resultado y podéis introducir todas las ideas que se le ocurran. Por ejemplo, el soplado (esfumatto).
Como podéis apreciar en la imagen superior se pueden conseguir artísticos efectos con esta técnica, más dinámicos que el simple goteo por gravedad que es la técnica más habitual al trabajar con crayones derretidos.
Los materiales que necesitamos son muy sencillos:
- Crayones de varios colores.
- Una pistola de calor o un simple secador del pelo.
- Un lienzo.
- Un cúter o un cuchillo afilado.
Agrupamos los crayones o pinturas por colores, nos resultará más cómodo para trabajar, les quitamos el papel que los recubre con el cúter o con un cuchillo afilado. Preparamos el lienzo y comenzamos, cogemos un crayón con una mano y con la otra el secador. Apuntamos el aire caliente hacia el crayón y vamos derritiéndolo. Hemos de ir probando con las distintas temperaturas y el selector de velocidad. Conseguiremos distintos efectos, con una temperatura más suave podremos crear una capa gruesa, con una temperatura alta y una velocidad alta conseguiremos efectos de goteo muy expandido. Es cuestión de ir probando, incluso podemos combinar el uso de la pistola de calor y el secador. Con la pistola de calor podemos derretir rápidamente el crayón y con el secador darle la forma que queramos.
Con esta técnica es muy importante la experimentación para observar los múltiples efectos que podemos conseguir según las distintas opciones que nos ofrecen tanto el secador como la pistola de calor.
Otra posibilidad es utilizar plantillas artesanales:
¡Quiero ver resultados!. Buen fin de semana a todos.
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